Reforma fiscal 2015: nuevas reglas de juego

La reforma fiscal que entra en vigor el 1 de enero trae buenas y también malas noticias para la farmacia. Vayamos, en primer lugar, con los aspectos positivos.

Sin duda que la bajada de los tipos impositivos del IRPF es la mejor noticia, aunque se trate de “una vuelta a la escala con cinco tramos de 2011”, como señaló el economista y socio de esta consultora, Juan Antonio Sánchez, en la jornada informativa “Optimización fiscal de la farmacia”, organizada por el COFM.

El Gobierno reduce, por lo tanto, la presión fiscal existente y, aparte de tributar menos por los ingresos generados, otro de los efectos previsibles es que los ciudadanos tendrán también más dinero en el bolsillo. Desde un enfoque más comercial que fiscal, los expertos recomiendan tener en cuenta este impacto positivo en el consumo, ya que impulsará las ventas libres de las farmacias a partir del 1 de febrero. Ventas que, por otra parte, se pueden ver mermadas en parte por la subida del IVA de muchos productos sanitarios al 21 por ciento a partir del 1 de enero.

Otra buena noticia es la bajada en la tributación de las ganancias patrimoniales a partir de 2015 y 2016, que obliga a aplazar la decisión de venta o transmisión de la farmacia para beneficiarse del nuevo tipo del 24 y 23 por ciento de los dos próximos ejercicios.

La otra cara de la moneda de la reforma fiscal es la eliminación de gran parte de las deducciones y desgravaciones vigentes. Las farmacias españolas deberán así apurar en su próxima declaración de la renta las distintas ventajas que todavía les brinda el actual marco fiscal, porque desde enero hay nuevas reglas de juego.

Conviene ponerse en manos de un experto para exprimir las deducciones por creación o mantenimiento de empleo que se modifican a partir del próximo ejercicio fiscal, al igual que las aplicadas por amortización del inmovilizado material. Hay que tener bien presente la eliminación de las exenciones en arrendamientos de locales o la supresión de la deducción del 20 por ciento sobre los beneficios por mantenimiento o creación de empleo, así como en cuota por inversión de beneficios recogidas en la Ley del Emprendedor que, sin duda, tendrán un impacto negativo en el empleo.

Son cambios, en definitiva, muy importantes en la gestión de una farmacia que los profesionales deben conocer y valorar a la hora de contratar, hacer una transmisión, decidir su política de amortización o invertir en el futuro, porque hay mucho en juego.