Archivos

Todo lo que debes saber sobre el botiquín casero

En la mayoría de los hogares tenemos botiquines, un mueble o una caja, que contiene  material de cura y medicamentos para pequeños accidentes domésticos o para el tratamiento de síntomas menores que no requieren intervención médica.

Debemos tener en cuenta que un botiquín casero no es un almacén con restos de medicamentos y tampoco es el lugar adecuado para guardar los medicamentos de uso diario de los miembros de una familia.

Si hay muchos medicamentos en el botiquín es más difícil conservarlos de forma adecuada y encontrar el que se necesita de forma rápida ante una urgencia. Además, también es más fácil confundir los medicamentos.

Es recomendable que esté situado en un lugar fresco, seco y preservado de la luz, conocido por todos los integrantes del hogar. La cocina y el baño no son habitaciones adecuadas. Debe estar fuera del alcance de los niños, siempre cerrado, pero ser de apertura fácil.

 

¿Qué debe contener un botiquín casero?

  1. Termómetro.
  2. Material de cura: algodón, gasas estériles, tiritas, vendas, esparadrapo, suturas quirúrgicas.
  3. Aplicador de frío – calor.
  4. Tijera
  5. Pinza: útiles para la extracción de cuerpos extraños.
  6. Jeringa desechable.
  7. Medicamentos: deben estar claramente identificados, para ello es importante que los guardemos con su envase original y su prospecto.
  •  Analgésicos y antitérmicos: el paracetamol es un buen analgésico para el dolor leve o moderado y no afecta al estómago, aunque no tiene acción antiinflamatoria.
  • Antiinflamatorios: sólo se deben usar cuando la dolencia está causada por una inflamación. Estos medicamentos pueden producir problemas en el estómago. El más utilizado es el ibuprofeno.
  • Anticatarrales: para aliviar los síntomas del resfriado común (congestión nasal, dolor de garganta, tos, etc.).
  • Sales de rehidratación oral: fórmulas útiles en caso de diarreas o vómitos importantes. Se deben tomar en pequeñas cantidades y con frecuencia, usando una cuchara o jeringa.
  • Suero fisiológico: podemos usarlo para el lavado de heridas y también para hacer lavados nasales y oculares.
  • Antisépticos: una vez lavada la herida, se puede aplicar algún antiséptico como la clorhexidina o la povidona yodada para evitar la infección de las heridas.
  • Antiácidos: para tomar de manera ocasional si tenemos molestias después de las comidas.
  • Productos para picaduras de insectos: ante una picadura de un insecto se debe aplicar frío durante un minuto, no aplicando hielo directamente. En caso de dolor, se puede utilizar un analgésico.
  • Pomada para quemaduras superficiales: en caso de sufrir una quemadura superficial, lo primero será enfriar la zona aplicando agua fría durante 15 minutos. Después se puede cubrir el área afectada con una gasa o un apósito no adherente. También se pueden utilizar gasas impregnadas en vaselina o pomada para quemaduras.
  • Pomada para escoceduras de la piel: aquellas que tienen alto contenido de óxido de zinc.
  1. Si en casa hay un bebé, se debe incluir un chupete, una tetina y una pomada útil para la dermatitis de pañal.

El botiquín debe estar limpio y ordenado. Tenemos que revisarlo al menos una vez al año para retirar los medicamentos caducados o en mal estado y reponer los que sean necesarios. Los medicamentos retirados del botiquín no deben tirarse a la basura ni por el desagüe, en las farmacias existe un contenedor (el punto SIGRE) específico para la retirada de estos medicamentos deteriorados o caducados.

 

 

Dejar un comentario