¿De verdad está pensando regalar un kit de medicamentos en su boda?
La Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria ha hecho una denuncia pública en los medios de comunicación cuanto menos curiosa. Al parecer, hay novios que consideran una magnífica idea repartir entre sus invitados un kit de medicamentos para neutralizar los excesos gastronómicos y alcohólicos de estos eventos. Se trata de packs de bienvenida donde pueden encontrarse fármacos para la acidez de estómago, el dolor de cabeza o el alivio de náuseas y vómitos.
Aunque no hemos sido testigos de este tipo de ocurrencias, qué duda cabe que el mundo de los detalles de boda es variopinto, según se puede comprobar en Internet. Se busca sorprender sin que el obsequio resulte especialmente caro. Y quizá sea esta la clave para que estos novios tan detallistas hayan pensado de forma tan inconsciente en la botica. Aspirinas, antiinflamatorios, antiácidos y protectores gástricos se encuentran entre los fármacos más consumidos y también entre los más baratos. Su coste tratamiento/día no supera los 0,5 euros en algunos casos.
Al margen de la consideración legal de esta distribución de medicamentos y de los evidentes riesgos que conlleva para la salud de muchos invitados a la boda que, probablemente, estén bajo tratamiento de la hipertensión, la depresión o con antibióticos, la anécdota revela la creciente banalización social no solo del uso y consumo de los medicamentos, sino también de su intermediación.
La proliferación de empresas, aplicaciones y páginas web que ofrecen todo tipo de servicios de venta y entrega de fármacos es un claro reflejo de esta situación, fruto muchas veces del desconocimiento, que la AEMPS y también este Colegio han denunciado en repetidas ocasiones.
Con razón hemos promovido una campaña para hacer hincapié en la necesidad de la receta médica y la importancia de que el medicamento esté sometido siempre a control y criterio profesional. ¡Recuérdelo!
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