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La adicción al teléfono móvil: la enfermedad del siglo XXI

Aunque no haya oído hablar de Nomofobia, este es un trastorno que afecta, al menos, a la mitad de la población. El término proviene del anglicismo “no mobile phone phobia” y hace referencia al temor y ansiedad de no poder consultar el smartphone cada vez que lo desee.

Para los expertos la nomofobia puede ser tan dañina y adictiva como el alcohol y el tabaco y, al igual que en estas adicciones,  los afectados no son conscientes del problema hasta que una tercera persona alerta sobre este trastorno que  se manifiesta con taquicardias, sensación de ansiedad,  pensamientos obsesivos, dolor de cabeza y dolor de estómago ante cualquier problema para conectar el dispositivo móvil.

Si tenemos en cuenta que un usuario medio consulta hasta 150 veces el smartphone al día, según pone de manifiesto  un reciente estudio realizado por la Fundación Telefónica, valoramos el impacto real que tiene este problema en España, donde oficialmente existen más líneas de teléfono móvil que  habitantes. Estos datos resultan especialmente preocupantes  para Desconect@, un programa psicoeducativo que persigue  un uso responsable de la tecnología entre los más jóvenes, quienes además presentan trastornos asociados como la llamada whatsappitis, un término acuñado por la revista científica  ‘The Lancet’ para definir los problemas que muchas personas presentan en los pulgares hinchados y entumecidos de tanto teclear por el uso continuado de las aplicaciones de mensajería.

Y aunque parezca una contradicción, en este mundo conectado, el teléfono se ha reconvertido en un instrumento  para frenar su propia adicción. De hecho ya son varias las aplicaciones que han nacido con el objetivo de ayudar a controlar el deseo irrefrenable de consultar el móvil.

La primera de estas ‘apps’ es Moment, una aplicación gratuita  que bajo el lema “Deja el celular y retoma tu vida” registra el tiempo diario de uso del teléfono y permite establecer límites que sirven para que el usuario sea consciente de que está abusando del aparato.

Flipd es otra alternativa que desconecta  las aplicaciones del teléfono y solo permite realizar tareas básicas como responder un mensaje de texto automático, recibir llamadas o hacerlas a un número reducido de contactos incluidos en la lista de emergencia.

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