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Soplar y sorber en farmacia al mismo tiempo

Resulta muy confuso y contradictorio observar cómo algunas administraciones insisten en sacar medicamentos del canal de farmacia para dispensarlos en el hospital y, por otro lado, se reparten ayudas a las oficinas de viabilidad económica comprometida (VEC). Es decir, lo que se empobrece por un lado, se subvenciona por el otro.

La última administración en anunciar esta medida ha sido el Servicio Gallego de Salud, que pondrá en marcha un plan piloto en Orense que retirará de la farmacia la dispensación de medicamentos inyectables contra el cáncer para administrarlos en los centros de salud.

¿Su objetivo? Está claro que ahorrar, pero cabe preguntarse a qué precio y quién más se beneficiará de esta medida, aparte del Sergas. Porque serán los pacientes los que tendrán que desplazarse al hospital o al centro de salud para acceder a su medicación, lo que también implica un coste económico y de tiempo que se multiplica en las zonas rurales. Así que, lo que se ahorra al evitar el pago de la aportación reducida en el caso de enfermos crónicos, se pierde en transporte y en tiempo invertido, sin tener en cuenta otras consideraciones de seguimiento y adherencia al tratamiento.

El resultado de este tipo de enfoques cortoplacistas es que son cada vez más las farmacias que necesitan las ayudas VEC, según el último informe del Consejo General de Colegios Farmacéuticos (Estadísticas de Colegiados y Oficinas de Farmacia 2014). En total, 687 farmacias se encuentran en esta situación de precariedad económica, un 10 por ciento más que el año anterior.

Difícilmente se puede seguir pidiendo la colaboración de la farmacia cuando se sigue empobreciendo al sector. El último informe de Antares sobre el estado de la farmacia en España demuestra el estancamiento económico que sufre el modelo, con márgenes reales del 5-6 por ciento una vez se descuentan todos los gastos e impuestos asumidos por los farmacéuticos.

Otras veces nos hemos preguntado en este mismo blog por los lastres que impiden a la farmacia invertir en su futuro.  Sin duda que vaciar a la farmacia del único segmento del mercado financiado que seguirá creciendo en los últimos años es una condena del modelo que debemos evitar. La farmacia española necesita recuperar muchos de los tratamientos que ahora se dispensan a pacientes externos en los hospitales si queremos seguir avanzando.

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