Troplowitz, el farmacéutico que revolucionó la cosmética con Nivea, la crema más popular del mundo

En 1911, el doctor Oskar Troplowitz, un farmacéutico visionario, logró dar con la fórmula de la que sería la crema más famosa del mundo: Nivea. Una fórmula que contiene glicerina, ácido cítrico, aceite de rosas y de lirios de los Alpes, además de Eucerit, un emulgente llamado la cera de la belleza que combinaba una sustancia activa con aceite y agua. Este descubrimiento, que en un principio pensaba enfocarse para usos médicos, supuso una revolución al incluirlo en una crema cosmética, la primera del mundo que proporcionaba hidratación de larga duración. Su inmaculado color blanco inspiró su nombre, tomado del adjetivo latino niveus, que significa blanco como la nieve.

La historia de esta marca arranca unos años antes, cuando Troplowitz compra la firma Beiersdorf, cuyo nombre figura en los libros de química gracias al desarrollo de las primeras cintas adhesivas técnicas (Tesa) y las primeras tiritas (Hansaplast). Posteriormente formará equipo con el profesor Paul Gerson Unna, un dermatólogo e investigador de reconocimiento mundial; e Isaac Lifschütz, un químico apasionado por la innovación. Este equipo será la base fundamental para el desarrollo de la marca global Nívea.

El éxito de Nivea fue rotundo e inmediatamente se extendió por toda Europa. En 1913 había traspasado las fronteras y la crema ya se vendía por Estados Unidos, Canadá, Brasil, Argentina y Méjico. Tras la primera salida al mercado en un envase amarillo, Troplowitz comprendió que ni la calidad del producto ni la modernidad del envase serían suficientes, por eso, en 1925 emprendió una potente campaña publicitaria y se empezó a utilizar la pequeña lata metálica de color azul, constituyendo uno de los objetos más icónicos de la historia con apenas pequeñas modificaciones en su diseño a lo largo del tiempo. El hecho de mantener las características del envase durante los años no es ninguna casualidad y los colores blanco y azul se relacionan con las propiedades de la crema: frescura y naturalidad.

A lo largo de las décadas, la investigación ha desarrollado productos pioneros como la loción corporal, crema solar con factor de protección, una gama especial para hombre y productos antienvejecimiento, pero la crema hidratante sigue siendo el producto más vendido de la marca con 100 millones de unidades en 200 países. Desde su lanzamiento, la fórmula apenas ha variado y se producen 50 toneladas de la crema al día, lo que supone 125 millones de latas anuales, una cifra que posiciona a Nivea como marca de referencia para varias generaciones a lo largo del tiempo en todo el mundo.